A propósito de la Paciencia…

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A propósito de la Paciencia…

Actualmente la vida social y laboral exige inmediatez. Todo lo que queremos tiene que ser “¡para ya!”, ocasionando que nuestra vida cotidiana no tenga sensatez y seamos menos comprensivos con los demás. Estamos siempre de “prisa”. La invitación es detenernos y pensar en ¿qué es la paciencia?, ¿qué tan paciente somos? o si ya es un hábito qué no seamos pacientes.

La paciencia proviene del latín pati, que significa sufrir, la invitación es a entenderla como un aprendizaje para soportar los contratiempos, como la virtud de tolerar, de comprender, de darse un tiempo para contemplar y disfrutar las actividades que se hacen, de no dejarse envolver por el afán.

Con el fin de que detectemos que tan pacientes somos, la invitación es a resolver este pequeño test (No te demorara más de 1 minuto):

1. ¿Abres la alcancía antes de que esté completamente llena?
2. ¿Prefieres pagar taxi que salir más temprano?
3. ¿Prefieres comprar gaseosa que hacer el jugo natural?
4. ¿Eres de los que no tolera que la fila más larga del lado avance más rápido que la tuya?
5. ¿Prefieres llegar tarde que esperar a la gente?

Tabla de resultados

4 a 5 respuestas afirmativas: 100% ansioso
3 respuestas afirmativas: 50% ansioso
2 respuestas afirmativas: 80% paciente
1 respuesta afirmativa: 100% paciente

Respira y piensa…

Qué tal si revisas la paciencia desde tus finanzas, por ejemplo, el ahorrar puede ser una forma de medir la paciencia, pero si se quita de vista el objetivo, nuestra meta será cada vez más inalcanzable y lejana.

Así que lo primero para comenzar a cancelar tus deudas es tener paciencia, organizar tus gastos prioritariamente, reducir cuotas y crear nuevos planes de pago. Esto te ayudará a tener una vida más tranquila.